"LA FE POR LA CUAL VALE MORIR"

A veces cuando los ristianos se encontraban reunidos en sus templos, el emperador Maximo mandaba a  sus soldados a amontonar leña alrededor de los edificios y quemarlos con los cristianos adentro. Pero antes de prender fuego, se proclamaba que cualquiera que estuviera dispuesto a sair afuera y sacrificar al dios Jupiter salvaria su vida. Contestaban entonces, desde adentro que no conocieron a Jupiter; que Cristo fue su Señor y Dios, y que para él vivirian o moririan. Fue un milagro de gracia que de entre estos varios miles de cristianos asi amenazados cn la muerte no salio ni uno. Todos unanimemente cantaron y alabaron a Cristo mientras el humo de sus sacrificio subio como una nube a los cielos.
Esto ocurrió alrrededor del año  237 a.c.
 Un joven español fue martirizado por los moros en córdoba.
Abad ar-Rahman III era califa  (gobernador) de los moros. El califa de los moros vivia en aquel entonces  (mientras los moros ocupaban a España) en la ciudad de cordoba.
Ahi mismo vivian tambien unos cristianos. Su pastor se llamaba Ermoigo.
Al califa de los moros no le gustaban los cristianos. Para moletar al ministro Ermoigo, arrestó a su sobrino, un muchacho llamado Pelagio, al cual guardo  preso en su palacio.
Pelagio estuvo en el palacio tres años. era creyente y tambien un muchacho bien criado y de buen parecer. Al califa le gusto pelagio, pero no quieso que siguiera la religion cristiana.
Un dia cuando Pelagio tenia casi catorce años, los moros decidieron hacerle abandonar la fe cristiana. Lo tentaron a cometer pecado inmoral. Le prometieron muchos privilegios si  lo hacia. pero Pelagio no cedió.
-Soy cristiano- dijo-, y voy a seguir la voz de Jesus todos los dias de mi vida.
Viendo que el muchchono dejaria su fe, el califa se enojó y mandó que se lo castigaran con pinzas y que lo arrastraran por la calle. Cuando despues de esto Pelagio rehusó  negar su fe, el califa dijo a sus soldados:
            -¡cortenlo en pedazos y echenlo al rio! Los soldados le cortaron entonces los brazos, despues las piernas  y al fin la cabeza. Asi lo ecahron al Rio Guadalquivir en el año 925 a.c.

Estos mártires entregaron su vida por  el Señor, y aun cuando sus cuerpor fueron destruidos ellos murieron con la mirada puesta en su creador.

¿cuantas veces nos hemos molestado por alguna ofensa que los inconversos nos hacen? ¿cuando hemos dicho:- no voy mas a la iglesia porque mis amigos se burlan cuando lo hago? ! este joven Pelagio contaba con tan solo 14 añitos de edad!! era tan solo un niño, pero su corazon estaba totalmente entregado a su Señor que nada pudo obligarlo a negar su fe.
Dios quiere que seamos cristianos genuinos, consagrados a su obra y que creyamos con todo el corazon que si sufrimos por su causa es uno de los mas grandes privilegios.

Consagremos nuestras vidas cada dia a nuestro Dios, vivamos diariamente con él.